viernes, 27 de febrero de 2015

El DIARIO DE FER TEMP 2 CAPITULO 3




TEMPORADA 2
CAPITULO 3
“LA VIDA DEMANDA SER VALIENTE”

Seguíamos en el agua, todos estábamos borrachos, aun había media botella para nosotros, conté que no sabía nadar y a uno de mis amigos se le ocurrió la grandiosa idea de llevarme hacia lo profundo, así yo solo aprendería, me tomo de la cintura mientras en un descuido le di la espalda, me cargo, tomamos mucho esa noche y hacíamos las cosas sin pensar, podían ahogarme con sus locuras, entre pataleos y gritos vi frente a mi parado a Armando y me tome de lo primero que pude agarrar, jale su cadena y el me tomo la mano y me acerco hacia él; ya déjenlo, dijo.


Alguien puso música desde su celular, seguíamos sirviéndonos shot tras shot, me encontraba en una de las esquinas disfrutando el agua, de un lado miraba a mis primos y mis amigos hablando estupidez y media, creo que sus cerebros ya no procesaba bien de tanto alcohol, del otro lado estaba ese guapo hetero que me había salvado de morir ahogado, comenzó a bailar una de las canciones electrónicas que estaba sonando, movía su cintura lentamente de un lado a otro, se veía realmente sexi, se percató de que lo veía, solo rio y siguió haciéndolo.

Más tarde, después de terminarnos las botellas que habíamos comprado, estábamos demasiado tomados así que decidimos que ya era hora de irnos a dormir antes que los huéspedes del hotel se quejaran por tanto escándalo, entramos al cuarto, corrí al baño a vomitar, me había pasado de copas lo único que quería ya era acostarme a dormir, hace tiempo que no probaba una gota de alcohol y ahora que lo hice se me había pasado la mano.
 Me pare como pude sobre el lavado y moje m cara, respire profundamente y Salí lo más normal posible, no quería que se dieran cuenta que se me había subido, ya estaban todos acostados, en una de las camas todas las chicas y en la otra los borrachos de mis amigos, encendí la televisión, puse uno de esos canales de música mientras me regresaba el sueño, estaba en la orilla de la cama, no podía moverme mucho o caería por un costado, el aire acondicionado seguía a todo lo que daba, el pequeño cuarto estaba convertido en un congelador, al poco rato mis ojos ya permanecían a fuerzas abiertos, me levante a apagar la tele, al regresar ya habían ocupado mi lugar, no había ningún espacio para poderme acostar, Armando estaba en la orilla del lado de la pared, me hizo un espacio para que pudiera acomodarme a su lado.


No podía dormir bien, me movía de un lado a otro, sentía como el alcohol regresaba por mi garganta, él se percató de que me sentía un poco mal así que coloco su brazo para que yo pudiera recargar mi cabeza, eso me calmo y pude quedar en paz por un momento. Más tarde me volví a levantar, me senté en la cama, mire a las chicas y a los chicos, estaban todos dormidos, me volví a  recostar, pero esta vez más cerca del pecho de armando, el frio era más insoportable conforme entraba más la noche, al fondo podía escuchar el sonido de las olas rompiendo a la orilla de la playa, de pronto  el subió sobre mí una de sus piernas, quede entre ambas, estaba confundido, no sabía si lo hacia conscientemente o era parte de su borrachera, me moví un poco y el levanto su pierna nuevamente ahora quedando mi brazo entre ellas, el alcohol corría por mis venas, el cual hacia que me llenara de valor, el chico acostado a mi lado me había gustado desde que me lo habían presentado, a quien no podría gustarle un típico hetero, guapo y musculosos, me acerque aún más a su pecho, podía sentir el calor de su cuerpo, ese olor que me estaba volviendo loco y no me dejaba dormir, me quede quieto por un momento, escuchaba como su respiración era rápida y profunda, no era experto en el amor ni en el tema del sexo, pero mis pocas experiencias me hacían suponer que aquel chico estaba excitado, sin pensarlo más saque mi mano de entre sus piernas y la coloque sobre su entrepierna, mis sospechas eran ciertas aquel hombre se encontraba totalmente caliente, bajo su pantalón se formaba un gran bulto, pasaba mi mano de arriaba abajo, el continuaba con los ojos cerrados, dejándome complacerlo, baje lentamente su cierre para no hacer ruido, metí mi mano bajo su bóxer, tocaba su miembro que parecía querer explotar, el amigo que estaba acostado al otro lado mío se movió, saque mi mano rápidamente, asustado pues podrían cacharnos, se quedó dormido nuevamente. Ahora desabroche su pantalón, recorría con mis manos su pecho, su abdomen marcado que se movía al ritmo de su rápido respirar, me acerqué,  lo bese despacio y en silencio, baje por su cuello, el solo tocaba con sus dedos mi espalda, subiendo mi camisa y acariciando mi piel…



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